Un grupo intenta gritar
más fuerte que otros tantos,
argumentan fascinados
los pecados de otros cuantos
y la única verdad
es que cada uno de ellos,
cada uno de otros tantos;
son parte del mismo sistema
que siempre ha fallado…
¿Debiera, acaso, nuestra fe
ser individual y nuestro corazón más desconfiado?.
Anuncios