El viento soplará tan fuertemente que se llevará mi alma; y despertaré en una vida distinta, en una colmena reconstruida, en la que beberé de la mejor saliva algún beso con magia.
El viento soplará tan fuertemente que se llevará mi rabia; y despertaré en una vida distinta, en una almena ficticia, en la que aprenderé la mejor caricia algún enero en desgracia.
—M.