Te vi desnuda y fui un poema obsceno removiendo tu virginidad del más crepitante de los prejuicios, fui uno mismo con tu cuerpo, con la divinidad del tiempo que te hizo esperar por mi aliento.
Y al escuchar tu canto emocionado de gemidos y plegarias infinitas, estrelladas contra el paraíso intenso del orgasmo, fui extrañamente feliz, extrañamente nuestro.
Guardé en mi memoria cada instante, cada aroma, la constante de tu sexo hasta tu boca, las marcas pocas de tu piel inexperta; sobremesa de los veinte años esperando por el beso de mi boca, por el juego de mi sexo entre tus cosas.
Te vi desnuda y fui un poema tierno removiendo mi virilidad más dominante que era mi reino, mi carta de presentación, mi cielo e infierno y me hice guardían del amor que ya escurría de tu templo.
— MESSIERAL

Acerca de «Poesía Messieral»
Poemas, canciones e inspiradas letras del autor Messieral.
Newsletter
Suscríbete al boletín de correo electrónico en el que encontrarás todas las entradas nuevas de Messieral. (te espero).