Combustible autodestructivo,
llevando al límite mi mente y mi cuerpo para sentirme vivo.
¿De qué valdría hacerlo de otra manera?
¿De qué serviría perder el tiempo que me otorga cada mañana
lo que aún no es capaz de explicarme la ciencia?
Combustible radioactivo,
llevando al límite mi presente y mis recuerdos para sentirme vivo.
¿De qué valdría hacerlo por la fuerza?
¿De qué serviría perder el tiempo que me otorga cada mañana
lo que aún no es capaz de ignorar mi consciencia?
Buscaré fundirme con la luz una vez más,
hacer de los pequeños detalles el único hogar posible para mi fortaleza.
Buscaré fundirme con la luz en el final,
hacer de los pequeños instantes el único hogar posible para mi alma
cuando otra vez comienza.
—Messieral
MercyVille Crest, 18 de febrero de 2,025




Deja un comentario