Niño Envasado al Vacío

Desde el centro de mi desastre, la bitácora de mi catástrofe incoherente, toda la mediocridad que no quise tener es mía, tan mía que se aferra y no me quiere soltar. Me abarca como pocas veces alguna amante pudo, por completo. Me he tropezado con mis demonios y han sentido miedo de mi frialdad, existe un tipo de hielo capaz de evaporar los fuegos infernales, y es peor que el dolor, y es peor que la decadencia, y es peor que el pánico… El vacío.

El ser humano nace, crece, se reproduce y muere. Ya he tenido que nacer varias veces luego de joderla de nuevo, ya he tenido que empezar de cero cuando alguien más ha jodido todo y tengo que tomar los remos. He crecido y me ha crecido como a casi todos, eso está bien, pero junto a eso también ha crecido la pena, el desastre, las deudas, el caos y el vacío. Me reproduje afortunadamente, es un pequeño hermoso de verdad, al que le fallo a diario, me he aferrado a proyectos y sueños idiotas, a los  que les he dedicado más tiempo que a él, pero nada reprocha, es un encanto de cachorro, tiene los ojos más bellos entre todos, el beso de cada día que me hace sentir un poco más capaz, en el momento en el que todo estalle, en el que deje todo atrás por lo más le tendré a él, nada me faltará si es feliz y tiene la salud de campeón que posee. Lo amo desde el primer miércoles, le he cuidado a mi modo y nos queremos de una manera tan nuestra. El mundo fuera de nuestra complicidad miente, hiere, abandona y mata, pero pasamos momentos, juntos, muy buenos cada cierta vez. Lleva mi sangre y con eso yo sé que viviré entre su cuerpo, entre el camino exitoso que tendrá en lo que se proponga. No repetirá la historia, que no se leerá en los labios de nadie en mi funeral, no habría cosa peor, será feliz, lo sé, será el mejor como algún día fui yo…

He tenido amores increíbles, amores verdaderos y amores aburridos, he estado entre las piernas de un montón de putas, entre piernas de doncellas elegantes e intensas, incapaces de decir que no, si es que lo están disfrutando y nunca pude entender el sentido de mi camino. El mejor en la cama, el peor en la concreción de proyectos, efímero escurridizo por vocación, la silente huida de siempre, cantando a todas horas, dejando atrás el dolor para sonreír y que nadie sepa del vacío que me hela el corazón. He manipulado y mentido, pero más me han mentido a mí, me he enloquecido en conciertos de exquisitas notas, me bebí ese vino, fumé con los amigos y lo dejé cuando ella se fue, estuve una noche de diciembre con una diosa entre la cazadora, un invierno de mantarrayas en el bosque de la intimidad prestada con la chiquilla de corazón de cóctel, en la playa una vez enseñando, a la más de las heridas a adentrarse en el mar, con miedo pero cuidada por mis besos. Y entre muchas otras cosas, con el gran amor de mi vida, sintiendo el frío del daño, la tristeza y frustración decepcionada, persistiendo y engañándome yo mismo, al creerme que todo iría bien, que todo va bien, que no pasa nada, que podemos seguir adelante, que vuelvo a creer…

Luego quieres escapar y no lo haces, ya no eres capaz de amar pero lo haces, le fallas a lo más importante, le fallas a tu sangre y te humillan en otro idioma seres desconocidos, te incineran la libertad y te convencen a besos, con sexo, con mezcal mental que no es suficiente para embriagar, ni eyacular. Te duele todo el cuerpo y ahora te mata de aburrimiento y de soledad. Estás consciente de que evitaste un final antes necesario, que es tu culpa seguir aunque ya no quieras, hay proyectos y quieres alzar el vuelo, libre, como el que fui, con toda esa seguridad y sin detenerme por nada, ni por nadie, pero me he tejido cadenas por las que yo mismo soy inmóvil. A corta edad me siento acabado, desteñido, solo, esperando por la realización de un sueño que no tiene puerto de anclaje en mi vida, un sueño y muchos otros más que no sucederán… De frente al niño que fui, seguramente estaría llorando al ver lo que hice de él…

Lo he envasado al vacío, para retrasar su caducidad, para que sufra esta puta agonía de vivir sin vivir, de vivir sin morir, de sentir sin sentir, de llorar al sonreír, de fallar y caer, de intentar, de recibir daño sin merecerlo del todo, cayendo y efectivamente caer…

Ya no soy el de el calzado rebelde que se puso de pie en medio del infierno de cristal, ahora que ya no lo soy, que débil y destruido tendría que ponerme de pie no sé si puedo o quiero, si quiero o debo, si debo… Sí debo…

© Copyright – Messieral | Luis Eduardo – Historias en Ascuas
Ciudad de Guatemala 19/02/2016

Muchas gracias por sus ojos,
también les invito a leer estas otras  historias en ascuas:
Tonight The Juggle and The Clown!
De magia y no de momentos
De Frente al Fin del Mundo

5 respuestas a “Niño Envasado al Vacío”

  1. No lo envases al vacío. Te aseguro: el niño interior siempre goza de buena salud.
    Y si no, dime: ¿cómo se explica que te entusiasmas con este chiche raro de la ventanita, para compartir tantas cosas con otros que no te ven? ¿No es como una magia infantil, terca, empecinada, a pesar de todo…?

    Le gusta a 1 persona

    1. La verdad es que en este proyecto he encontrado mi salvación en varias formas :)

      Le gusta a 1 persona

  2. […] Gracias por sus ojos, les invito a leer estas  historias en ascuas: Tonight The Juggle and the Clown! Sello Inmortal de Tres Letras Niño Envasado Al Vacío […]

    Me gusta

  3. […] Hay dentro mío un rebelde, inconforme con las costumbres obsoletas, enardecido y vivo para con lo extraordinario, y sí, yo fui el que se partió de risa cuando el sacerdote dijo que Jesús nunca se hubiera atrevido a posar una mano sobre la piel de la Magdalena, con malas intenciones, porque jamás he creído que el amor y el sexo consciente sean una mala intención. Sí, yo partí el retrovisor de la patrulla de policía, de antebrazo como copiloto de aquella motocicleta roja, luego de su intento de mordida y extorsión, y sí, yo  me enamoré de ti hace muchísimos años, y a la distancia te hice mía. Sí, yo continué gustando de ti, sí, me importó muy poco quien estuviera a tu lado, porque en realidad tu dueño siempre he sido yo. Y la dueña de mis atenciones, de mi lucha infinita, de mis cursilerías, de mi pensamiento, de mis ganas y emociones más profundas siempre has sido tú.   El concepto que tienes de mí, es más amplio, incluso, que el que yo podría tener de mí, eso me reta a ser cada día y cada momento mejor para ti, nunca voy a dejar de ser lo que en esencia soy, este terco e incansable Luis Eduardo que te adora obsesivamente, tanto que tras diez años llegó a tu puerta vestido de extranjero, tal como lo prometió y perjuró, para quedarse por siempre contigo, para reclamarte como suya y sólo suya. Decidido e inconforme con la mediocridad, quiero que seas la princesa rebelde que se escape conmigo, a como dé lugar, vamos a ser libres, vamos a estar juntos, en nuestro propio universo y constelación, esa exclusiva para este amor valiente, reservada para nosotros, para ti y para mí, para nadie más.   Voy a luchar codo a codo y alma a alma contigo, eres mi razón y causa, sé que el resto de mi vida no lo quiero compartir con nadie más que contigo, sé que eres la mujer a quien quiero amar, seducir, enamorar, conquistar y cautivar a diario por el resto de mis horas infinitas.    Quiero vivir contigo y no sólo vivir en un espacio físico, sino hacer del universo entero nuestro hogar, todo nos pertenece, tanta grandeza sólo puede pertenecer a un amor así de inmenso como el nuestro, cada ventisca, cada gota de rocío, cada estrella nacida en el cielo y cada ciudad del mundo son sólo decoraciones para que vivamos este amor, inmensamente, intenso como nos plazca.    -Las cosas no tienen que ser como todo el mundo dice que son-   No somos amantes de promesas rotas e inconclusas, somos amantes de pactos tangibles, de amor real y natural, de libertad conquistada con valor y corazones fortalecidos.   Eres todas las canciones que me erizan la piel, eres cada paisaje que resalto con mi mirada fija en él, eres cada mar en el que quiero adentrarme, cada verano y cada nota futura nacida de mis manos, mi mente y mi voz. Eres cada letra de mi poesía, cada rabieta de mi rebeldía, cada sonrisa insumisa de mi viveza, mi sol de las cinco, y la brisa fresca, todo, el alma, el sentido, cada sentido, cada poro de estrella, cada cabello de luna, uno a uno los ojos del tiempo, mi tiempo…   Cada nudillo de mis manos, toda la fuerza de mis brazos, toda desembocadura de mi valentía, el infinito de ébano en mis ojos, mi culto secreto a lo extremo, mi devoción a la lluvia a destiempo, a lo inesperado, a las curvas peligrosas y a derrapar… Todo, todo, en tu cuerpecito e inocencia, todo, eres para mí. Todo cuanto necesito y requiero para ser feliz y libre por completo.   Y todo eso que no imaginaste nunca querer tanto contigo, eso soy, todo eso que sobre pasa las barreras de cualquier cosa que pudiste desear exclusivamente para ti, eso soy, ese amor incivilizado que tanto esperabas, soy yo… © Copyright – Messieral | Luis Eduardo – Historias en Ascuas Ciudad de Guatemala 10/01/2016 Gracias por sus ojos, les invito a leer estas otras historias en ascuas: Tonight The Juggle and the Clown! Sello Inmortal de Tres Letras Niño Envasado Al Vacío […]

    Me gusta

  4. […] Gracias por sus ojos, les invito a leer estas otras historias en ascuas: Tonight The Juggle and the Clown! Sello Inmortal de Tres Letras Niño Envasado Al Vacío […]

    Me gusta

Replica a Ese Amor Incivilizado que Tanto Esperabas, Soy Yo… – Messieral Cancelar la respuesta



¡No dejes que el silencio te aleje!
Suscríbete a la newsletter y recibe en tu correo nuevas entradas, actualizaciones y momentos únicos del universo de Messieral.

Únete a otros 2.547 suscriptores
Anuncios