De los pies a la tibieza, ida y vuelta, amanecer;
entregado por completo a la nobleza
que hace nido en tus formas de saber quererme bien.
Ningún otro recorrido es tan sincero, roce de piel,
para hacerme olvidar por completo la soberbia
y las dificultades para querer quererte bien.
De los pies a la grandeza, ida y vuelta, anochecer;
entregado por completo a la certeza
que hace sitio en tus formas de querer hacerme bien.
Ningún otro recorrido es tan sincero, deseo fiel,
para hacerme olvidar por completo la soberbia
y las dificultades para quererte querer bien.
—Messieral
MercyVille Crest, 6 de noviembre de 2,024
¡Estoy de vuelta y me encantaría que me acompañes en mis redes sociales, da clic a tu preferida!




Deja un comentario