A Escondidas

Cuanta poesía
existe en el cadáver de una rosa
sobre manos desatendidas;
cuanta cobardía
en el beso que ha robado, a escondidas,
un amante a la calle sin esperanza.

Cuanta infamia
existe en el cadáver de una dama
sobre manos prefabricadas;
cuanta pesadilla
en el tiempo que nos deja, a escondidas,
llenos de dudas que no acaban…

©®Messieral | messieral.com
Ciudad de Guatemala 16 de abril de 2,018

Este Descomunal Ir y Venir

Es descomunal este ir y venir,
del principio hacia el final,
correr en ciclos repetidos
que no llevan a ningún lugar
pero que nos devuelven de la tristeza a cantar.

Será la clase que le pongo a la elegancia
o el color de tus ojos rudos la razón,
será que no escucho nunca el móvil sonar
o que no nací programado para contestar.

Voy a seguir cantando a tu recuerdo,
no voy a olvidar tu dirección en Seattle,
ni que le dije a todos que estabas más lejos,
que ya no volverías a esta cruel ciudad.

Me voy a reír de las películas que veías,
de que resultaste ser otra Miss Carrousel,
de tu falda a cuadros sin principio, ni final,
de las promesas que te hice, de no cumplir al menos una,
de cumplirle, al menos cinco, a tu amiga la santina,
de esta ida y vuelta con destino
a nuestro sitio preferido que es ningún lugar.

Es descomunal ser niños y resolver las cosas
con más inteligencia que la de un adulto,
al ser adultos tener ganas de volver a ser niños,
dejar de soñar con Disneylandia, comenzar a entender
que el tiempo vuela y pasa, que la soledad es recurrente,
que ya nadie nos espera en casa,
que debimos quedarnos juntos,
que debimos tantas cosas, debimos y nada.

Voy a seguir cantando a tu risa,
no voy a olvidar tu desnudez en retrato,
tu cuerpo de diosa experta en acrobacias,
que de ti jamás se me han quitado las ganas,
por fin, me voy a beber el Jack Daniels que me regalaste,
lo voy a dejar de esconder en el zaguán de mis desastres.

Me voy a reír de las historias que escribías,
de que resulté ser un extranjero más que se iría,
de tu tierna locura sin principio, ni final,
de las promesas que me hiciste, de tu aderezo de aceitunas,
de la comida francesa que nunca pudiste emular,
de esta ida y vuelta con destino,
sin documentos, caminos o heridas,
a nuestro sitio preferido, aquel silente bar a escondidas.

Es descomunal este ir y venir…
¿Cuándo volverás?

Luis Eduardo (Messieral)
Ciudad de Guatemala 24/04/2016


Muchas gracias por sus ojos y por estar,
para más poemas les invito a leer mi sección Poesía,
no olviden que también pueden seguirme en mi
página de Facebook.


La Fotografía: El Viaje de la Vida, es propiedad y arte de Rocío Pardos a quien pueden seguir a través de su Blog: FOTOGRAFÍA ROCÍO PH y también pueden seguirla en su Fan Page de Facebook: UN VIAJE DE DIEZ MIL KILÓMETROS EMPIEZA POR UN SOLO PASO

De Besos Astronautas las Constelaciones de tu Cuerpo

Hay un sueño lastimado por nudillos de crueldad, una escarcha que ya no se va a quebrar, el filo andante de un marzo que marca la resignación, me he escapado a buscarte, esta noche no quiero saber más de lo que es mío, de lo que me ata a la realidad más sofocante que experimenté, y eso que he estado cerquita de morir.

Pero cuando estoy cerca de ti, al borde de la razón, me siento tan vivo, siento que en un segundo de tu respiración vivo los mejores años de mi vida, que en un milímetro de tu mirada caben los mejores atardeceres del mundo, de todas las ciudades en las que aún no te he besado.

Eres mi As bajo la manga, cuando el mundo me hiere yo pienso en ti, sueño contigo a escondidas, porque sólo tú sabrás siempre en dónde estoy, a dónde en realidad me escapo cuando mi vida se satura de tanta angustia, de tanta ira. A escondidas y con ganas de esconderme bajo tu sonrisa, me permites esta pieza y todas las que sean necesarias hasta que la calma vuelva a mí…

Hoy mi vida lastimada por nudillos de crueldad, ha confiado y ha recibido el golpe peor, pero no importa cuando pienso en esos besos, ese enero, en las noches de cariño en edredón. Me malgasto en esta vida que es tan poca para todo cuanto valgo, me siento dichoso por descubrirte aquel año, aquel casual momento, soy otra persona desde que te vi entrar por la ventana de mi vida. He estado perdiendo el tiempo lejos de ti, lo admito, ese ha sido mi gran error y aunque este no es el momento mejor para estar juntos, sé que eres la única capaz de dejarlo todo por mí, de dejar el mundo si es preciso, si lo pido con mi voz de «por favor no me digas que no»

Sé que te has sentido sola sin mi abrazo, sin los besos que esparcí por el universo y que siempre debieron ser sólo para ti, no te pido solamente otra oportunidad, te pido que me dejes luchar por ti, como luché sin razón por otras, que para tanto no valían. Rétame y lo que sea necesario lo haré si, al final del camino, te quedas conmigo. No me lo hagas tan fácil aunque me ames, haz que yo me gane el corazón que marqué a sangre y fuego aquel abril…

Y deja que de incendios haga mundos de ternura, que del tiempo perdido haga un cielo tan bonito como tu pensar, no me dejes tenerte sin antes vencerme, no me dejes llegar a ti sin ser todo lo que mereces, déjame ponerme a cuentas con lo que perdí.

Y deja que de maremotos haga cometas pequeñitos que giren rodeándote por tu habitación, con carteles en sus pieles que te afirmen que te amo, que merezco volver a llenar de besos astronautas las constelaciones de tu cuerpo… Y quedarme, en definitiva, para siempre.


Esta tarde recostado en sus piernas, en una acera cualquiera, acercó su palabra a mi entendimiento, susurró, desperté llamado por su voz: Dicen que han estallado una ciudad europea y que estallarán también esta ciudad, así que debemos empezar a caminar, yo hacia el norte, tú hacia el sur, en el otro lado del mundo nos encontraremos y sabremos así que esto que sentimos es verdad, vive, sufre, disfruta, pero nunca dejes de caminar, en ese último paso de tu cansancio estaré yo esperando por ti, cansada, sedienta, con bellos recuerdos, con nuevas experiencias del arte de vivir, pero sin detenerme porque sin duda volveré a ti…

Luis Eduardo (Messieral)
Ciudad de Guatemala 25/03/2016

Muchas gracias por tus ojos y por estar.
Para más historias visita mi sección Historias en Ascuas.

Estoy iniciando mi comunidad en Redes Sociales.
Si te interesa acompañarme, adelante y muchas gracias:

Facebook
Twitter
Instagram