Esta breve conmemoración del quinto año de existencia de este proyecto llamado Messieral, va dedicado a ti que has sido cómplice durante todos estos años de mis composiciones, de mis escritos, de mis recitales y demás creaciones. Cómplice, incluso, el año anterior en el que una absoluta sequía creativa me acompañó, dado que mi naturaleza y el encierro no combinan adecuadamente; y menos en estas circunstancias en las que hemos tenido que replegar un poco la libertad en pro de salvaguardar nuestra salud.
También está dedicada a quienes mantuvieron con vida mi blog, aún sin que yo pudiera publicar demasiado durante largas temporadas. Y, desde luego, a mis cercanos, a las personas que en los momentos más duros me mantuvieron cuerdo y con quienes aprendí a hacer un gran equipo para conseguir salir adelante.
A mis crasos errores, a mis grandes aciertos, a los amores de mi vida, a las horas perpetuas intentando descifrar qué seguía para mí y a seres queridos que, producto de la pandemia, no volveré a ver por ahora.
He vuelto para quedarme, esto apenas comienza y tengo muchísimos proyectos que presentarles en el transcurso de los próximos meses. Muchas gracias a todos y todas por siempre estar.
Messieral Studio 2 de febrero de 2,021
Messieral 