Esos besos, los mejores que probé, esa noche y la ducha que tomaste a la mañana siguiente no son recuerdos, tú no eres un recuerdo, aún tengo en mi voz pegadita tu boca y su lengua, aún conservo el aroma fresco de tu piel y esas fotos bajo el sol de aquel lunes a orillas del lago y tu miedo a navegar…
MESSIERAL
Ciudad de Guatemala 04/06/2016