De los callejones oscuros
en los que rompimos la ley
a penas quedan los ruidos
que el silencio esparce sin fe;
ya no se ahogan gemidos
entre la luna y el piso,
ya no se escuchan aullidos
entre tu cuerpo y el mío…
Pero te recuerdo cada vez
que aparece abril a mi paso,
sueño con el aroma de tu piel
y con el frío de la noche trato.
Y es tal la intensidad de tu caricia
que se quedó a vivir en mi voz,
cuando hablo de mi vida
es menester hablar de ti al primer hervor…
©®Messieral | messieral.com
Ciudad de Guatemala 13 de marzo de 2,018
Siempre esa historia que recuerdo con tanta emoción, tan llena de complicidad y locuras varias que ocurrieron en un tiempo increíble.
Escrito #26 de la selección Messieral MMXVIII
Publicación Original: https://messieral.com/2018/03/13/al-primer-hervor/