Fue en un concierto de rock
donde perdimos cordura,
donde la contemplación y el amor
convertimos en locura.
El estridente sonido imprudente,
las llaves mortales de la depresión,
me gusta el vestido que traes
y tú no me quites la emoción.
Varamos en una estrella muerta,
nos llenamos de sangre las penas,
fabricamos pequeños asesinos
que ahora en el pecho nos dan golpecitos,
como duendes incansables en flor…
Llámame cualquier día, yo estaré para estar,
tendré el hambre dispuesta a tocar,
búscame entre el bolsillo secreto de tu falda,
donde te guardas los modales y el azar,
escúchame en el fuego de aquellos mecheros
y jura por ti que no me vas a olvidar…
Fue en un concierto de rock, el verdadero último beso,
el verdadero último verbo que nos supo cantar,
nos hizo perfectos el tiempo incluido,
nos hizo dichosos el sexo al final,
hoy bebo tus últimos cuatro suspiros
y el abrazo que yo nunca supe apreciar…
Fue en un concierto de rock, fue en el templo de Ptah ,
eres la llaga en mi acorde solito, el epíteto de mi marca dorsal…
Luis Eduardo (Messieral)
Ciudad de Guatemala 30/04/2016